Aseguraba Margallo que
Rajoy contempla todos los escenarios posibles y de forma concreta. Lo
más probable es que, ya declarado el golpe, los escenarios, los
papeles, se le suban por las barbas.
Hay que comprender que en
estos tres años pensaría de buena fe que el soufflé se desinflaría
por sí solo y pelillos a la mar, que todo no era mas que un
teatrillo.
Ahora que no hay más
remedio que tomarlo en serio, al menos ante la gente, “¿qué
hacer?”, “¿hacer o parecer hacer?”.
Lo proporcional a un Golpe
de Estado en toda regla y además en directo, sería abortarlo de raíz, y neutralizar a los facinerosos,
máxime cuando es por sí mismo una afrenta a la dignidad colectiva
(¿qué dirán de nosotros nuestros hijos y los hijos de nuestros hijos?). Pero
no es mucho apostar que para don Mariano tanto no toca y lo
proporcional sería desproporcional. Con recurrir recurrentemente es
suficiente. Incluso si no se elige President, igual se para el
tiempo, al menos hasta el 20D, que es lo que cuenta.
¿A quien teme Don
Mariano?
Cómo de una lectura
generosa de la Constitución resulta imposible que pueda haber un
presidente de Gobierno cobarde, sería como tener un Papa ateo, sus
temores no deben ser de carácter, ni de convicción, ni siquiera por deformación, sino por algunas
razones, aunque estén equivocadas. Estas razones avalarían los
siguientes escenarios, al fin y al cabo, si atendemos a la observación de
García Margallo, escenarios del miedo:
-que la intervención del
Estado saque a la calle a las masas separatistas, el mundo se alarme
y la Comunidad Internacional obligue a un referéndum ante el caos
reinante.
-que las masas de
izquierda, únicas que en España se movilizan por algo pero siempre
contra los gobiernos de derecha, también se movilicen, reprochando a
Rajoy la responsabilidad del desaguisado por no haber negociado ni
dialogado.
-que al actuar como es
debido el público de derechas, los suyos, caiga en la cuenta de que
no había hasta ahora control, que pasaba algo cuando se le decía
que no pasaba nada, y que le haga responsable de haber permitido
llegar a este extremo y a tanta molestia ya en Navidad.
-que en conclusión si hace algo todos se lo reprochen por lo mismo y lo contrario, y que si no hace nada igual no se nota.
Y frente a estos temores
podría ser que, bien pensado, de verdad “no pasase nada”, por
mucho que pasase, mientras los EEUU, Alemania, Francia, Rusia...etc,
no reconozcan a Cataluña como Estado independiente. Como hay que
esperar que eso no ocurra, tocar madera, él mismo haría acopio de
valor y aplomo para seguir apareciendo ante la opinión pública como
la garantía de que aquí no pasa nada y podemos dormir tranquilos. Y
además que el Barça, pase lo que pase, seguirá en la Liga,
faltaría más.
Aunque es posible que no
tenga miedo por nada, sino que aún crea que la comedia continua y
esto no es más que otro acto. ¿No ha sido todo una comedia hasta
ahora? ¿por qué no ha de seguir siendola?. Todo es cuestión de
acostumbrarse al sueño.
En el PP ya deberían haber aprendido que hagan lo que hagan siempre van a tener en contra la crítica del resto de partidos, por eso no se comprende que Rajoy esté haciendo muchas cosas en contra de su electorado y en contra de sus (presuntos) principios.
ResponderEliminarSi te van a criticar, por lo menos se consecuente.
Muchos votantes del PP echamos de menos mas firmeza contra los catalufos.
P.d. Se leen ahora mucho mejor sus entradas, gracias.